La Industria Algodonera Textil (Inaltex Ltda.) se fundó en Sucre en 1974 y luego se expandió a Santa Cruz, iniciando en 1980 sus operaciones en el Parque Industrial. Sus fundadores, Antonio Abuawad y Elsa Telchi, junto a sus cinco hijos, sacaron el negocio familiar adelante, pese a la estrepitosa caída de la producción
de algodón en el país.
Eduardo Abuawad, gerente general de la firma, manifestó que hoy Inaltex, que lleva 39 años en el mercado y genera más de 100 empleos, es la principal proveedora de productos hechos con algodón boliviano a hospitales y clínicas del sector público y privado.
—¿Cómo cambió el negocio del algodón desde los años 90?
El algodón ha subido mucho de precio y lastimosamente ahora, además, está escaso porque no hay ningún incentivo a los algodoneros, sino que es a la suerte de cada uno. Nosotros sembramos entre 100 y 150 hectáreas en la localidad de Tuna y carretera Transcon, allí tenemos cosecha propia del algodón en rama, pero como eso no nos alcanza tenemos que comprar a otros proveedores nacionales, incluso el hilo de algodón.
—¿A cuánto asciende su producción de algodón?
Nuestra producción es entre 15.000 y 18.000 kilos de algodón al mes y entre siete a ocho toneladas de hilo de algodón.
—¿En cuánto se ha incrementado su producción?
Tenemos un crecimiento de un 8%, impulsado también por el aumento de la población. Las ventas crecen en esa misma proporción.
— De todos sus productos ¿cuáles se venden más?
Fabricamos una variedad grande de productos, desde el algodón hidrófilo dirigido al sector médico hospitalario, bolitas y discos de algodón para maquillaje y uñas, hasta vendas de gasa. El algodón capullo de 400 gramos es el de mayor venta porque se lo usa bastante en clínicas y hospitales, así como la gasa hospitalaria de 100 yardas.
—¿Piensan innovar en algún nuevo producto?
Sí, estamos esperando una maquinaria que prevemos llegue hasta fin de año, con la cual vamos a innovar con nuevos productos y se va a incrementar nuestra producción.
Los equipos llegarán de diferentes países de Europa.
—¿Cuántas máquinas nuevas van a adquirir?
Son ocho máquinas para fabricar algodón hidrófilo y vendas. Recientemente nos han llegado máquinas para procesar vendas y hacer gasas.
—¿Son los líderes del mercado nacional?
Tenemos una competencia en La Paz, pero estamos liderando a escala nacional. Nuestras mayores ventas se concentran en el eje troncal del país.
—¿Cómo hacen frente a la competencia de productos importados?
Al país ingresan muchos productos chinos. Nosotros estamos preocupados porque son muy baratos y hay muchos hospitales que prefieren lo económico a la calidad. Otra pequeña parte llega desde Brasil.
—¿Qué requieren del Estado para frenar el contrabando?
Un mayor control en las fronteras. Tenemos muchos trabajadores. El 95% de lo que fabricamos se hace con productos y mano de obra nacionales y esto significa un costo aparte, pero a un productor del exterior no le cuesta lo mismo.
—¿Cómo están en materia de calidad los productos de Inaltex?
Procesamos el algodón 100% natural y virgen, que tiene la clasificación SM, que sirve para hacer hilo, el cual ocupamos para hacer algodón hidrófilo. En los 39 años que tenemos, garantizamos la calidad de nuestros productos.
—¿Qué les ha significado haber recibido el Premio Nacional a la Calidad IB?
Es un orgullo haber recibido este reconocimiento del Instituto Boliviano de Normalización y Calidad (Ibnorca), pues hemos pasado por unos controles rigurosos por seis meses y nuestros productos han sido destacados por su calidad.
—¿Han exportado?
Hemos exportado, pero preferimos atender el mercado nacional y tenemos agencias desde aquí (Santa Cruz) hasta Cobija, Yacuiba, Camiri, en todos los departamentos.
Con las nuevas maquinarias seguramente ya vamos a poder exportar.
—¿Han tenido pedidos desde el exterior del país?
Sí, hemos tenido varias solicitudes desde Venezuela y Paraguay. Estos contratos están en statu quo por el momento porque queremos abarcar primero el mercado interno y atenderlo de la mejor forma posible.
—¿Cuándo prevén que exportarán?
Tenemos pedidos y esperamos estar exportando hasta mediados del año que viene.
Hay unas cuatro empresas interesadas de Paraguay y otro tanto de Venezuela.
—¿Cuáles son sus planes a corto plazo?
El primer paso es obtener la ISO 9001, que sabemos que será dificil, pero se logra. Estamos capacitando a nuestra gente. Luego, esperamos que nos llegue toda la maquinaria que importaremos para pensar en exportar
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